€€€€Precio: muy caro • Eastern european • Gramercy Park
Érase una vez, en Moscú y San Petersburgo, una mítica mujer llamada Mari Vanna que daba la bienvenida a su casa a los comensales y les ofrecía cocina rusa tradicional en su mejor porcelana y manteles. Todos eran bienvenidos y los más asiduos recibían su propia llave para volver a este refugio acogedor cuando lo deseasen. En la actualidad, Mari Vanna ha abierto su restaurante en Nueva York, en una famosa cuadra entre el Flatiron y Gramercy, y hace las delicias de neoyorquinos, vecinos y turistas por igual que desean comer, beber y disfrutar, así como experimentar la verdadera hospitalidad rusa.
El menú ofrece platillos clásicos rusos, como la habitual y sabrosa sopa borsch con Pampushka, betabel, caldo, carne de res, col blanca, zanahorias y papas servidas con crema agria en una hermosa sopera que tiene capacidad para segundos y terceros tiempos. Mari Vanna abre para el almuerzo, el brunch y la cena los 7 días de la semana.
